martes, 27 de julio de 2010

A DON ELOY BENITO CALZON -Jefe de la Policia Municipal de Avilés -Octubre de 1988

¡Te doy mil gracias Benito, pues me salvaste la vida,
cuando tú me recogiste, de aquella triste caída!
¡Era un Domingo de Octubre, lo recuerdo todavía,
y se cumplieron, ¡Once años! y yo sigo con mi herida!
Mi médula está dañada, muy cerca de la cabeza.
Tengo dos operaciones, y tengo mucha tristeza.
He llorado amargamente; pero en miles de ocasiones;
Pero, ¿Qué somos Benito? ¡Solo somos ilusiones!
Me encuentro muy limitado, y no ando más de cien metros.
y siempre estoy agotado, y esto no es ningún secreto.
Los dolores, me atormentan, y yo no suelo mentir;
Pero, la fe me sostiene, y no me importa morir.
Tengo una gran compañera, que yo siempre llamo esposa,
y es la que me da la vida. ¡Es la cosa más preciosa!
¡Ella me bañó mil veces, cuando yo no me movía!
y sufrió un buen tormento, que ella no lo merecía.
Mis dolores son constantes, y me duran todo el día.
No me valen los calmantes; ¿Será que lo merecía?
Por las noches, no hay dolor. Los nervios quieren reposo;
Pero en cuanto hay movimiento, yo sufro como un coloso.
Que Dios té de mucha suerte, y que goces de salud;
y además, yo te deseo, mucho amor y mucha LUZ.


Recibe un sincero saludo de Cecilio

Salinas Octubre 1.989

No hay comentarios:

Publicar un comentario